Banda acabada. La Policía mató a cinco integrantes de la banda “30-30”, incluyendo a su jefe, Jeffrey Trenzas, a la que se le atribuye una cadena de secuestros, asaltos y muertes para robar.

  • Los Alcarrizos vivió noche aterrorizadora y mortal

    Parientes de los hombres muertos en Los Alcarrizos lloran durante el velatorio. José A. Maldonado

  • Los Alcarrizos vivió noche aterrorizadora y mortal
Sauro Scalella
sauro.scalella@listindiario.com
Los Alcarrizos, RD

Las manchas de sangre, los casquillos en las calles, junto a los huecos de los impactos de balas en las paredes y el temor de moradores, fue el escenario que prevaleció ayer en la Calle 4, sector Las Mercedes, del municipio Los Alcarrizos.

Fue el resultado de una balacera que alrededor de las 10:00 de la noche dejó un saldo de seis personas muertas, que la Policía definió como delincuentes pertenecientes a la banda “30-30” que lideraba Jeffrey Trenzas, uno de los caídos.

“Nos asustamos. Tengo niños pequeños y ellos comenzaron a desesperarse… yo escuché los disparos y me quedé donde estaba”, expresó Gregory Bonilla, quien al momento de dirigirse a los reporteros de LISTÍN DIARIO se notaba visiblemente nervioso y atemorizado.

Esa noche del martes 13, agentes de la Dirección Central de Investigación de la Policía Nacional (Dicrim) mataron a tiros a cinco personas, incluidos dos policías activos que formaban parte de la banda criminal, denominada “30 – 30”,  que tenía bajo azote a la zona de Las Mercedes y a todo el municipio de Los Alcarrizos.

El informe de las autoridades señala que una patrulla, cuando se encontraba de servicio en la calle 4 del sector, por donde transitaban los supuestos malhechores a bordo de un carro negro y que al notar la presencia policial, le emprendieron a tiros.

Tras la agresión, los agentes informaron que repelieron la agresión, matando a los cinco delincuentes, quienes fallecieron mientras recibían atenciones médicas en el Hospital Dr. Vinicio Calventi.

Según moradores, más de 20 disparos se escucharon durante la confrontación que despertó a todos los residentes de la zona. 

“Yo me metí debajo de la cama, eso fue tiros y tiros”, narró Franklin Ureña, quien vive cerca de donde se produjo el acto.

De acuerdo con residentes, cerca de donde se produjo el hecho funcionaba un supuesto “punto de drogas” que estaba identificado por tener en letras grandes y amarillas “30- 30”, que figuraban en una puerta de hierro de color marrón.

Los muertos fueron identificados como Eric Ramón Pérez Germán, conocido como “El Mello y/o La Braza”, de 28 años; Jeffrey Bienvenido Rosa Ferreras, apodado “Jeffrey Trenzas”, de unos 36 a 40; Adrián Antonio Rodríguez Torres, de 30 años; Steven Betances Lachapel, de 26, y la otra persona solamente denominada como “Milesy La Pólvora”, de 30 a 35.

Las mismas autoridades confirmaron que Rodríguez Torres como Betances Lachapel, eran cabo y alistado de la Policía, respectivamente, y se encontraban en proceso de investigación por casos no especificados.

El “cabecilla”

Tanto las autoridades como las opiniones de las personas del sector, señalan a “Jeffrey Trenzas” como el cabecilla del grupo y que tenía a “más de 300 personas” trabajando para él en actos delictivos, como secuestros, atracos, asaltos, amenazas de muertes, entre otros. Rosa Ferraras, a quien la gente también lo conocía como “El Cojo”, quedó en esa condición producto de un disparo que se le propinó mientras perpetraba un atraco en Herrera, según una fuente de la Policía Nacional.

“Mi hijo era inocente”

Mientras el informe policial reseña que a Pérez Germán se le ocupó una pistola marca Pietro Beretta, calibre 9mm., serial ilegible, con tres cápsulas, la cual portaba de manera ilegal, sus familiares aseguran que el joven de 25 años de edad “no estaba involucrado en nada y que fue la Policía quien lo implicó en el hecho”.

“Mi hijo nunca había caído preso. No tenía antecedentes penales gracias a Dios. Mi hijo ni por redadas ha caído preso…oye que lo que pasa cuando tú te crías y tienes amistades, tú puedes ser lo que tú seas, de la índole que sea, los policías que estaban ahí se criaron con él y ellos estaban ahí hablando y los policías llegaron y tiraron sin mediar palabras con nadie”, expresó Odalís Pérez, padre de Erick, en medio de su velatorio.

Además, el padre, quien es dirigente por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), indicó que su hijo no estaba involucrado en nada y que fue la Policía quien lo implicó en el hecho.

Pérez exigió “respuestas contundentes” y, a la vez, le hizo un llamado al ministro de Interior y Policía, Jesús Vásquez, y al jefe de la Policía Nacional, Eduardo Alberto Then, a quienes aseguró conocer “muy bien” a que se retracten y digan la verdad.

Una sexta víctima

Luego de que ocurriera la balacera en Las Mercedes, un hermano de Raudy Eliezer Soriano fue a buscarlo a su hogar con la excusa de que fuera junto con él al hospital Vinicio Calventi, para preguntar por uno de los policías, miembros de la banda, involucrados en el acto.

De acuerdo con el testimonio de una tía de Raudy, un militar del Ejército de la República Dominicana (ERD), que funge como seguridad del Calventi, impidió que su sobrino entrara al hospital, provocando que este intentara agredir al miembro del Ejército con una pistola que previamente despojó de su hermano, quien es agente policial.

Tras originarse este escenario, el militar, sin medir palabras, le disparó a Soriano, provocándole la muerte en las afueras del centro de salud.

El hermano de Raudy resultó apresado después del hecho.

Con relación al índice de criminalidad en la zona, varios residentes presentaron versiones distintas. Mientras unos indican que “hechos como este no suceden a menudo y que tenían años que no pasaban”, otros señalan que la poca presencia policial en la zona ha provocado que los delincuentes y la banda de los “30-30” se apoderaran de los alrededores.